El secreto para una estufa impecable: consejos prácticos para limpiar sin complicaciones
Una limpieza inmediata tras cocinar y rutinas semanales de mantenimiento pueden reducir el riesgo de accidentes y prolongar la vida útil de este electrodoméstico clave en los hogares colombianos.
Estudios advierten que el vinagre y el bicarbonato, aunque populares en redes sociales, no eliminan bacterias patógenas; el jabón neutro sigue siendo la opción más efectiva y segura para la limpieza de la estufa.
Bogotá, octubre de 2025. Mantener la estufa limpia parece una tarea sencilla, pero muchas veces se convierte en un verdadero dolor de cabeza, entre el ritmo acelerado de la rutina diaria, los derrames inevitables y la acumulación de grasa. Sin embargo, especialistas en el cuidado del hogar recuerdan que más allá de la apariencia, la limpieza adecuada de la estufa está directamente relacionada con la salud, la seguridad y la durabilidad del electrodoméstico.
En la cocina, pequeños hábitos marcan grandes diferencias. Por eso, la multinacional mexicana mabe comparte tres consejos que facilitan el aseo y alargan la vida útil de uno de los electrodomésticos más importantes del hogar:
1. Prevenir siempre es más fácil que limpiar
El mejor truco para no pasar horas frente a una estufa manchada es evitar que los derrames ocurran. Cocinar a fuego bajo o medio, tapar los recipientes y no sobrecargar ollas o sartenes ayuda a reducir salpicaduras y a prevenir accidentes. La prevención no solo ahorra tiempo, sino que evita que la grasa se incruste en quemadores y superficies.
2. El jabón neutro gana la batalla a los mitos caseros
El vinagre y el bicarbonato, tan populares en redes sociales, cumplen una función más estética que higiénica. De hecho, un estudio publicado en el Journal of Applied Microbiology evidenció que el vinagre puede reducir la presencia de ciertos microorganismos, pero su efectividad es mucho menor frente a bacterias patógenas. El bicarbonato, por su parte, funciona como abrasivo suave para manchas y olores, pero carece de acción desinfectante comprobada. En contraste, el jabón neutro sigue siendo la opción más segura y confiable: actúa descomponiendo la grasa y eliminando microorganismos sin dejar residuos nocivos.
3. Una rutina que prolonga la vida de la estufa
Más allá de lo inmediato, la disciplina marca la diferencia. Dedicar un día a la semana a una limpieza más detallada de la superficie y los quemadores garantiza un mejor funcionamiento, mientras que una revisión mensual de filtros y rejillas ayuda a mantener la eficiencia energética. Cuando los quemadores están tapados, el gas no circula correctamente, lo que no solo afecta la cocción de los alimentos, sino que aumenta el consumo.
Además de estos hábitos, existen alternativas que hacen aún más sencillo mantener la estufa en buen estado y ahorrar tiempo en su limpieza, como explican los especialistas de mabe.
“Contar con un electrodoméstico de fácil limpieza es clave en la rutina del hogar. Por eso, recubrimientos como TEON facilitan el cuidado de las estufas al proteger las cubiertas de acero inoxidable contra el amarillamiento por el calor y hacer más sencillo el aseo diario”, recomienda Angelica Acevedo, gerente de producto cocinado de mabe para la región andina
“Para conservarlo en óptimas condiciones, recomendamos usar desengrasantes suaves sin soda cáustica un químico fuerte que se usa en los productos de aseo, limpiar cuando la superficie esté fría y secar bien parrillas y perillas antes de colocarlas nuevamente. Así, las estufas se mantienen como nuevas por más tiempo”, finaliza.
La estufa es, en muchos hogares, el corazón de la cocina. Mantenerla limpia no es únicamente cuestión de orgullo o presentación, sino de seguridad y bienestar. Con solo cuatro pasos simples prevenir, limpiar a tiempo, usar jabón neutro y mantener una rutina constante es posible transformar la tediosa tarea de limpiar en un hábito sencillo y efectivo que alarga la vida del electrodoméstico y brinda tranquilidad a toda la familia.